Qué es el DAFO y para qué sirve

por | Ago 30, 2024 | Consejos

Hoy venimos con otra de esas siglas que tanto nos gusta utilizar en el mundo del márketing digital: DAFO. Un análisis muy útil que no debería faltar en ninguna de tus estrategias empresariales. Puede que al principio dé un poco de pereza, pero créenos, merecerá un montón la pena por toda la información que puedes extraer. ¡Palabrita de Visual Publinet! Así que, si quieres saber qué es la matriz DAFO y para qué sirve, quédate a leer este post. Te lo explicamos de pé a pá y bien clarito.

 

¿Qué es el análisis DAFO?

Antes de entrar en materia con lo que de verdad nos interesa, es importante conocer un par de conceptos claves sobre qué es un análisis DAFO. Esta herramienta nos ayuda a conocer cuatro puntos básicos de un negocio, producto, marca o, en realidad, de cualquier cosa que necesitemos analizar. ¡A saber! Debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades.

Como resultado tendremos una fotografía súper completa de la situación actual de un negocio, producto, marca (o de lo que sea) para poder tomar decisiones estratégicas a corto, medio o largo plazo. Y con toda esta información elaborar una estrategia de marketing será pan comido.

 

¿Qué es un DAFO? Partes que lo componen

¡Pero vamos al grano! Que aquí lo que de verdad interesa sobre qué es el análisis DAFO son las partes que lo componen y las culpables de que reciba este nombre.

Debilidades

Saber qué cosas no estás haciendo (tan) bien es igual de importante que conocer aquellas en las que lo estás petando. Intenta recopilar todos esos aspectos que te debilitan o que crees que hacen menos fuerte tu negocio.

Amenazas

Pero no todas las cosas negativas dependen de ti, el entorno también puede influir mucho sobre tu empresa. Agrupa situaciones poco favorecedoras para tu marca y tendrás claras tus amenazas. Además, si las identificas a tiempo tendrás tiempo de sobra para diseñar una estrategia con la que evitarlas.

Fortalezas

Responde a la siguiente pregunta: ¿qué te diferencia frente a tus competidores? Cuando lo tengas claro, ya tendrás definidas tus fortalezas. Para que te hagas una idea, una fortaleza podría ser ofrecer un producto único en el mercado o dar una atención 24/7 los 365 días del año.

Oportunidades

A veces, en el entorno o en el sector en el que se mueve nuestra empresa surgen factores positivos que pueden resultar favorables para su desarrollo. Saber aprovecharlos y utilizarlos a tu favor puede marcar la diferencia en el crecimiento de tu empresa. Porque ya sabes lo que dicen…¡El que no corre vuela!

 

Qué es y para qué sirve un DAFO: plan de acción

El saber no ocupa lugar y toda esta información está muy bien, pero si la guardas en cajón dejando que acumule polvo no te va a servir para nada. ¡Así que manos a la obra! Utiliza todo lo que has recopilado y elabora un plan de acción concreto en el que plantees el rumbo o la dirección que le quieres dar a tu negocio.

El objetivo es exprimir al máximo las oportunidades y conseguir hacer frente a las amenazas sirviéndonos de nuestras debilidades y fortalezas. Y, para ello, hay cuatro tipos de estrategias básicas.

Ofensiva

Si unes las fortalezas de tu marca con las oportunidades que te ofrece el exterior, tienes como resultado una estrategia ofensiva. En este caso estás uniendo todos tus puntos fuertes, tanto los internos como los externos, para hacer crecer a tu empresa.

Imagínate por un momento que tu posición en el mercado es de líder del sector. ¡Pero no solo eso! Además, la demanda del producto que ofreces no para de crecer. Tienes que aprovechar esta situación (que conoces gracias al análisis DAFO) para tomar medidas y atraer a nuevos clientes.

Defensiva

Utilizar tus fortalezas para reaccionar ante las amenazas externas se considera una estrategia defensiva o reactiva. Aquí se trata de sacar tu mejor versión y potenciar al máximo todos esos puntos fuertes.

Seguimos con el ejemplo anterior e imagínate que, después de ese pico de ventas, la demanda baja. Utilizar tu posición de líder del sector creando nuevos productos puede ayudarte a compensar esa situación.

Adaptativa

Si se presenta una oportunidad en el mercado, tienes que subirte al carro sí o sí. Pero, para hacerlo, tendrías que corregir primero tus puntos más flojos. Pues justamente esto es lo que buscan las estrategias adaptativas: modificar las debilidades internas debido al análisis de las oportunidades del mercado.

Tras tu DAFO detectas que, por ejemplo, tu servicio de atención al cliente no está muy desarrollado. Pero, ¡sorpresa!, es un punto que valoran un montón los consumidores. Trabaja para mejorar esta debilidad y no pierdas la oportunidad.

Supervivencia

El nombre de este tipo de estrategia ya nos da bastantes pistas de que se utiliza cuando la cosa no va nada bien. Las estrategias de supervivencia se desarrollan a partir de analizar las debilidades y amenazas, es decir, que cogemos todos los puntos débiles (internos y externos).

Antes de tirar la toalla hay que buscar estrategias para dirigir la posición de la empresa hacia una más favorable. Por ejemplo, si una parte importante de tus clientes se ha ido a la competencia, tendrás que fijar estrategias de fidelización para frenar la fuga.

¡Y ya estaría! A partir de todas estas estrategias toca definir las acciones que se van a realizar de forma concisa y detallando bien cómo piensas llevarlas a cabo para conseguir todos los objetivos planteados. ¿Nos ponemos a ello?